A través de su Gerente de Relaciones Institucionales, Ignacio Fernández, el Ente Deportivo provincial entregó guindas a la novel escuelita de rugby infantil que se dispuso en el barrio Moreira de Trelew. La intención es fomentar el deporte en los lugares más carenciados.
Desde hace unas semanas, un grupo de ex rugbiers de la zona, encabezados por Gabriel Blotta y Martín Montoya, comenzaron a trabajar en un importante proyecto social e inclusivo. Se trata de integrar al deporte a los chicos de los barrios más carenciados de Trelew, en este caso, el Barrio Moreira.
En un pequeño descampado y casi sin materiales, este grupo entusiasta de profesores que intentan dar una mano a quien más lo necesita, comenzaron a trabajar hace un par de semanas y de a poco la actividad comienza a ser furor en el barrio.
Hoy son casi 40 nenes y nenas que se acercan a las clases de rugby que se llevan adelante tres veces por semana. Claro que las ganas y el entusiasmo muchas veces no bastan si no hay elementos para acompañar este desarrollo.
Es por ello que este miércoles, Chubut Deportes se hizo presente en el Barrio Moreira, representado por su Gerente de Relaciones Institucionales, Ignacio Fernández, para entregar guindas que posibiliten una práctica más dinámica.
“Una actividad que salva vidas”
Uno de los profesores que encabezan este proyecto, Gabriel Blotta, contó que “yo practico rugby hace muchos años y es una actividad que da sus frutos, que salva vidas, que le da una opción nueva a los chicos para salir un poco de la calle, dejar las esquinas y juntarse un poco más con los amigos”.
Añadió que el rugby es un deporte en el cual “se comparte, se enseñan los códigos y valores como la amistad y el respeto. Todo esto se transmite después en la casa, es decir que aprenden valores y se acercan al deporte, que te lleva a una forma de vida más sana.
Además, valoró que es una actividad “didáctica y totalmente inclusiva”, porque “lo pueden practicar gordos, flacos y hasta aquellos que nunca han hecho ninguna disciplina”.
En cuanto a la actualidad del proyecto en el Moreira, señaló que “es un barrio que me ha abierto las puertas y por ello estoy muy agradecido, son muchísimos chicos y vemos que hay muchos interés porque se han sumado las madres y de a poquito nos vamos a organizar mejor, tratando de imitar lo que es un club”.
Recalcó más adelante que “los sábados nos juntamos a hacer la actividad y hacemos el famoso tercer tiempo, donde se enseña a compartir”, revelando que la idea a futuro “es poder hacer encuentros con otros barrios, mezclarlos y dejar de lado los problemas inter barriales que muchas veces los grandes generan, porque donde hay una pelota de rugby hay amistad y juego”.
Respecto a los elementos recibidos señalo “a Nacho Fernández lo conozco de años de enfrentarnos en el rugby y esto es lo que deja el rugby, la amistad. Después de tanto tiempo lo llamé y enseguida me respondió. Hoy recibimos estas guindas que es el elemento más importante que nos hacía falta, por lo que estamos más que agradecidos”.
Por último, pidió “a quien escuche, quiera y pueda colaborar con esta escuelita, nos hace falta algún escudo de choque aunque sea viejo, bolsa de tacle, conitos, escaleritas de coordinación. Todos será bienvenido, así sea viejo”.
